La organización suiza, Arge Kipro, realizó el jueves y viernes pasados un seminario internacional en el que se debatieron los alcances jurídicos de la luha contra la explotación sexual de niños en el
extranjero.
BERNA, Suiza.- Un destacado grupo de personalidades internacionales pidieron la aplicación de medidas jurídicas más enérgicas para castigar a los ciudadanos suizos que cometan abusos sexuales contra niños en el extranjero.
El seminario fue auspiciado por la organización no gubernamental Arge Kripo y el Comité suizo del Fondo de las Naciones Unidas para la  Infancia y la Familia. Los participantes analizaron el tema de las bases legales para los juicios que se realizan fuera de su territorio nacional.
También se habló sobre la colaboración de las autoridades nacionales entre sí y con los organismos no gubernamentales especializados en el tema. Se tocó el problema de la pornografía infantil que se difunde por Internet y las formas de cómo enfrentarlo.
Miles de ciudadanos suizos y de otras naciones del llamado primer mundo viajan regularmente a países asiáticos, africanos y latinoamericanos y cometen delitos contra niñas y niños nativos.
Normalmente estos extranjeros no son castigados por la justicia y los casos aumentan con el paso de los días.
Esta realidad coincide con el aumento del número de mujeres de países del sur que en Europa trabajan en la prostitución como medio de sobrevivencia. Brasil y República Dominicana, en Latinoamérica y El Caribe, son dos de los países más marcados por este problema.
Este seminario se realiza a solo cinco semanas de la llegada a Ginebra de las diferentes marchas que se están realizando en diferentes continentes contra el trabajo de los niños. La movilización de todos
los países del mundo por la infancia finalizará en la sede de las Naciones Unidas el 1 de junio próximo.

Fuente: Agencia Informativa Púlsar. Quito. Eucador
 27/04/1998
El Salvador: Trabajo infantil
 
La pobreza que aqueja a poco más de la mitad de los salvadoreños ha obligado a que casi medio millón de niños cambien los juguetes por el trabajo.
SAN SALVADOR.- Los trabajos de los menores de edad van desde las tareas agrícolas, domésticas, comercio y servicios. La mayor parte de estos menores no pueden asistir a las escuelas.
Otros realizan tareas de alto riesgo como la fabricación de juegos pirotécnicos o la búsqueda de conchas en los esteros, actividad que les obliga a tomar estimulantes y fumar tabaco.
Ricardo Quiñones, presidente de la Fundación Olof Palme, que se ocupa de los niños trabajadores de este país centroamericano, dijo que el trabajo infantil tiene como base la pobreza que oprime miles de familias.
Ricardo Quiñones sostiene que entre el 80 y 85 por ciento de los niños trabajadores salvadoreños se desempeñan en el comercio informal y sin tener el amparo ni protección de las leyes del trabajo.
Esta situación se repite en casi todas las naciones centroamericanas, especialmente en aquellas en donde existieron conflictos y guerras internas, provocadas por los gobiernos estadunidenses.