Vertederos / Las crecientes cantidades de residuos sobresalen de los vertederos, exigiendo cada vez más espacio. El vertedero del Garraf, donde va a parar la mayoría de la basura de Barcelona, es al límite de su capacidad. A pesar de las medidas preventivas, los vertederos siguen afectando las poblaciones más cercanas y sus liquidos, gases y demás sustancias tóxicas contaminan las aguas subterraneas, rios, terrenos y el aire.
Llevemos cesta.
Compremos sólo lo necesario, no
te dejes seducir por la representación de las cosas.
Rechazemos los productos de “usa y tira”.
Rechazemos las bolsas de plástico
y pedimos bolsas de papel.
Rechazemos productos con envoltorio innecesarios.
Compremos al mercado a granel y no en
grandes superficies.
Compremos bebidas con envases reutilizables,
mejor que los reciclables
Los residuos de los alimentos, cuando
no stán mezclados con otros residuos, se pueden transformar en abonos
de gran utilidad para la agricultura.
Evitamos comprarlos en bolsas de plástico
y envoltorios innecesarios (bandejas de corcho blanco, etc.) que encarecen
el producto. Separa la basura orgánica reutilizando las bolsas que
ya tienes y exige que haya contenedores separados para depositarla.
Disminuiremos la utilización de
abonos químicon en la agricultura. Mejoraremos el estado de los
suelos y la calidad de los alimentos.
El papel que consumimos viene de la celulosa
de millones de arboles. Ahora podemos reciclar el papel y el cartón.
Acostumbrate a llevarlos a los contendores apropiados, y exige tenerne
uno cerca de tu casa.
No olvides que la mayor parte del despilfarro
de papel y cartón se debe a los embalajes excesivos. Elije papel
reciclado y que no se haya blanqueado con cloro. Utilizalo por las dos
caras. Sustituye servilletas y pañuelos de papel por otros de tejido.
Conservaremos los bosques, que regulan
la temperatura de la Tierra y el agua de los ríos. Son fuente de
alimentación y de hogar de mucha gente y muchos animales. Ahorraremos
dinero de nuestro bolsillo.
El vidrio es un material más higienico
y menos contaminante que el plástico. Las botellas se pueden volver
a llenar. Una misma botella puede servir hasta 40 veces o más.
Opta por las bebidas, los zumos, yogurts,
leche, etc. en botellas de vidrio. Mejor si son retornables. Hasta que
no se consigua que todos los envases sean reutilizables, acostumbremonos
a dejarlos en el contenedor apropiado para que sean reciclados.
Ahorraremos materias primas y energía
y adquiriremos habitos más saludables. Ayudaremos a crear puestos
de trabajo en nuestro entorno.
La mayoría de los plásticos
no se degradan. Por su volumen ocupan muchísimo espacio en los vertederos
y cuando se incineran generan gases tóxicos.
Evita al máximo su consumo. Exige
a las administraciones y a las empresas que vendan los productos envasados
en vidrio retornable, o en papel y cartón. Sepáralos y depositalos
en los contenedores especiales.
Respiraremos aire menos contaminada. Disminuiremos
los riesgos de contraer enfermedades cómo el cancer, immunodeficiencias
y otras.
Los tetrabriks están hechos de
cartón, plástico y aluminio, que son muy difíciles
de separar y reciclar. Son perfectamente sustituibles por el vidrio.
Evita su consumo.
La producción de latas es muy contaminante
y solo una pequeña parte se recicla. Casi siempre cuestan más
de la bebida que contienen. Con las latas perdemos todos: la Naturaleza,
los bolsillos, los puestos de trabajo cercanos.
Evita su consumo. Infórmate de
la situación de los basureros en el Ayuntamiento de tu barrio.
Ahorrarás dinero y contaminación.
Todas las pilas contienen metales tóxicos,
como el cadmio, el plomo o el mercurio. El mercurio es extremadamente peligroso
por la salud humana y para el medio ambiente. Si mezclamos las pilas con
el resto de residuos, lo contaminaremos todo y no podremos aprovechar nada.
Si vienen incineradas son aún más peligrosas por qué
generan vapor de mercurio que llega al aire que respiramos, a la tierra
y al agua.
Evita el uso de pilas, enchufa los aparatos
a la red eléctrica. Si no puedes evitar su consumo, rechaza las
que contienen mercurio y procura que sean recargables. Una vez utilizadas,
depositalas en los contenedores instalados en los lugares de venta.
No pondremos en peligro la salud humana
y la de todos los seres vivos.
Estos productos generan residuos muy tóxicos
y complejos de tratar. Muchas veces no son imprescindibles.
Infórmate sobre los productos que
puedan sustituir los quitamanchas, blanqueadores, etc. También existen
pinturas y barnices sin metales pesados. Hay programas de recogida de aceites
de coche en los talleres, de medicamentos en las farmacias, etc. Pero hace
falta un lugar donde llevar los residuos tóxicos domesticos, como
los fluorescentes usados y los restos de pinturas, disolvents, etc.
La mejor manera de tener un medio ambiente
sano es REDUCIR el consumo de sustancias contaminantes y de artículos
innecesarios, y REUTILIZAR todo lo que sea posible.
REUTILIZAR quiere decir hacer servir una
cosa por otra finalidad, en lugar de destruirla o reprocesarla: reparar
zapatos, vender o intercanbiar muebles o ropa. Es valorar los materiales
extraidos de la naturaleza y el trabajo humano que viene incluido en cada
objeto que utilizamos.
No olvides que el RECICLAJE aprovecha
los residuos pero exige un gasto de energía en la recogida,
transporte, clasificación y procesamiento.
El RECICLAJE sólo es la mejor opción para
los objetos cuya vida útil haya
acabado del todo.Evitaremos contaminar y crearemos puestos de trabajo en
el barrio.
Después de ver las tres páginas
anteriores extraidas de un folleto ecologista, ¿como concretarias
un política de las tres Rs en vuestra esculela?
Viendo la Notícia aparecida en
el pais de 30 de julio de 1997, observareis que el pàpel de la administración
es fuente de debates, informaros y presentar a vuestr@s compañer@s
el debate entre el ministerio y las organizaciones ecologistas sobre la
ley de residuos y embalajes.
INMACULADA G. MARDONES Madrid
La ministra de Medio Ambiente, Isabel
Tocino, se va de vacaciones con una nueva ley bajo el brazo –la de Residuos–,
a la que presentó tras ser aprobada ayer por el Consejo de Ministros,
como un ariete que contribuirá a sustituir el eslógan «usar
y tirar» por el de «usar y reciclar». El Consejo Asesor
de Medio Ambiente entiende que es insuficiente porque no se marca objetivos
preventivos y opta por la incineración.
Para la ministra Isabel Tocino la trasposición
a una ley de una vieja directiva comunitaria (1991) sobre tratamientos
y gestión de residuos, supondrá un cambio radical de mentalidad.
El país está acostumbrado a consumir cosas y tirar sus restos,
como un signo de abundancia. El objetivo que se pretende con la ley es
acabar con esa práctica y mentalizar a la ciudadanía en la
idea de que los residuos que produce -cuantos menos mejor- deben incorporarse
a la naturaleza sin dañarla.
Su tratamiento es tan genérico
–se trata de una ley básica– que apenas marca objetivos, siendo
así que existe el compromiso de que en cinco años todos los
municipios con más de 5.000 habitantes habrán tenido que
implantar la recogida selectiva de basuras.
La ley, basada en borradores de la administración
del PSOE, ha sido desprovista de un Fondo Ambiental provisionado con impuestos
a la gestión de los residuos (se estudia su inclusión en
la Ley de Acompañamiento) y deposita en los productores y gestores
la responsabilidad de su tratamiento, reciclado, valorización, almacenamiento
y, en su caso, la incineración.
Incineración
Es este aspecto el que más preocupa
a los ecologistas. Desde el CAMA a la CODA o Greenpeace, que califican
el texto de «insuficiente», consideran a la incineración
la tecnología más contaminante y cara de gestión de
residuos, como reconoce la consultora Coopers & Lybrand en un informe
elaborado para la Dirección General de Medio Ambiente de la CE.
Los ecologistas achacan al MIMAM la continua
aprobación de leyes obsoletas y contrarias a las tendencias internacionales.
Con esta ley, dice Greenpeace, «se permitirá el traslado de
los residuos entre comunidades autónomas, lo que favorecerá
el desplazamiento de los desechos hacia las regiones más pobres».
Para Cristina Narbona, ex Secretaria de Estado de Medio Ambiente y portavoz
parlamentaria socialista de Medio Ambiente, se trata de una ley de mínimos
«que ha renunciado a los impuestos medioambientales y no aborda con
energía los problemas del deficiente control en la generación
y tratamiento de residuos».
En su opinión el MIMAM debería
proponer a las autonomías fórmulas de cooperación
que permitan ampliar la red autonómica de inspectores, aprovechando
los cuerpos nacionales de Inspectores de Empresa, con los que se complemenaría
esa vigilancia. Narbona lamenta que no se haga obligatorio el inventario
de suelos contaminados y aboga por exigir a las empresas –como se hace
en los Estados Unidos, a informar públicamente de los residuos nocivos
que generan en sus procesos productivos.