ACCIONES ENÉRGICAS

La exposición oral en clase es el resultado de vuestro trabajo en grupo. No se trata de explicar todo lo que sabéis, sino de hacer comprender el problema de la energía y plantear alternativas. A lo largo de todo el cuaderno os hemos proporcionado información y recursos suficientes para desarrollar el tema. Las soluciones que se han propuesto no siempre están al alcance de todos, algunas, de hecho, se nos escapan de las manos. Por ejemplo, nosotros podemos pedir que se preme la instalación de energías alternativas, pero la decisión final la tienen los gobernantes. Se puede y se debe influir, pero la correspondencia no es directa.

De todas formas, otras veces la solución pasa por que cada uno de nosotros ponga su granito de arena. Por eso es bueno que las personas, tanto de forma individual como colectiva, seamos energéticamente activas. Y justamente esto es lo que tendríais que transmitir a vuestros compañeros y compañeras en la útlima parte de la exposición.


PERSONAS ENERGÉTICAMENTE ACTIVAS

En el apartado anterior del cuaderno hemos presentado medidas encaminadas a conservar la energía. Recordad que os hemos dejado la posibilidad de proponer alternativas ahorradoras. Si habéis hecho el ejercicio, podréis hacer un listado de acciones para que vuestros compañeros/as no malgasten energía.

Seleccionad los consejos energéticos que sean más útiles y más próximos a la vida de los jóvenes de vuestra edad. Utilizad ilustraciones y poned el énfasis en el cambio beneficioso que resultará de la acción.

Aquí tenéis un ejemplo...

Que hacemos Que deberíamos hacer Que conseguiríamos
Dejar las luces encendidas
cuando salimos de una
habitación
Cerrar siempre las luces.
Utilizar fluorescentes compactos,
que gastan cinco veces menos
Evitar la emisión a la
atmósfera de130 kg.
de CO2, y reducir la
factura de la luz.
Viñetas extraídas de la campaña "el teu aire", elaborada por el Sericio de Medio Ambiente de la Diputació de Barcelona (1993)

Presentad los consejos en murales, esto facilitará la atención de vuestros compañeros/as y permitirá que puedan retener durante más tiempo los contenidos transmitidos.


COLECTIVOS ENERGÉTICAMENTE ACTIVOS

Los seres humanos somos animales racionales y sociales. Como tales, muchas de nuestras actividades las realizamos conjuntamente con otras personas. Por lo tanto, si antes os hemos propuesto acciones individuales, ahora podríais hacer lo mismo pero pensando en un colectivo y situándolo en un espacio concreto. El lugar que mejor se adapta a estas necesidades es el instituto, ya que es el único lugar que es compartido y conocido por toda la clase, además de ser el más frecuentado.

Una buena idea podría ser hacer un trabajo de investigación en el que se estudien todos los ámbitos escolares que tienen relación con la energía. Sería como hacer una pequeña auditoría energética, es decir, un análisis del funcionamiento del instituto con el objetivo de comprobar la eficiencia o el derroche de energía. Esto serviría para ver qué cosas se hacen bien y cuales tienen que mejorar. Por norma, la parte final del estudio contempla la presentación de las necesarias medidas correctivas. En el caso concreto que nos ocupa, las conclusiones podéis exponerlas el mismo día de la exposición, y tienen que servir para llevar a cabo decisiones colectivas en el ámbito escolar a favor del ahorro energético. Utilizando un símil deportivo, es como si hiciéramos una serie de fotografías a un atleta para ver y corregir sus defectos.


La finalidad principal de la auditoría es formular estrategias para que el centro de enseñanza reduzca hasta el mínimo posible el grosor de las dos flechas.

A continuación os proponemos recursos y pistas que os facilitarán la realización del estudio.

El decálogo del buen instituto

Observad vuestro entorno atentamente y extraed las conclusiones pertinentes. Intentad reponder a las preguntas siguientes: ¿Que es lo que nunca tendríamos que hacer en un instituto? ¿Que es lo que podríamos hacer mañana mismo para mejorar la eficiencia energética?

Cada vez que voy a un insti, veo cosas sorprendentes y que nunca he acabado de entender: alumnos que se ven obligados a abrir las ventanas de sus aulas, en pleno invierno, por la excesiva potencia de la calefacción; fluorescentes encendidos en días de un sol resplandeciente; grifos y cisternas que pierden agua sin parar, etc. ¿Pasa lo mismo en vuestro insti?

Buscad la complicidad de vuestros compañeros y compañeras cuando formuléis las propuestas para hacer un instituto energéticamente más activo.

Hasta aquí hemos llegado, ya me pongo como cuando acaba el día... ¡Espero que hayáis pasado una buena jornada!... Ahora sólo nos queda desearos enérgicamente buena suerte y proporcionaros un buen saco de recursos.