PANARABISMO Y NACIONALISMO ÁRABE

JOSÉ A. ANTÓN VALERO
ENTREPUEBLOS


Introducción
Propuesta de actividades
La independencia árabe
El panarabismo
Liga Árabe y Estado de Israel
Palestina


INTRODUCCIÓN

Como ya dijimos en el Bloque 6, se hace necesario conocer más de cerca la parte árabe y analizar con mayor profundidad el movimiento nacionalista que también existía en el área cuando llegaron los judíos a Palestina.

Este movimiento se manifestó de dos maneras. Por un lado a través de lo que se ha dado en llamar Panarabismo que tiene sus raíces en el resurgimiento intelectual de¡ siglo XIX y cuyo objetivo era el de conseguir la unión de los pueblos árabes. Este proceso tuvo un reflejo en la constitución de la Liga de Estados Árabes que ha incrementado su número con países africanos, lo cual amplia a los demás países islámicos, no árabes, sus planteamientos.

Por otro lado, y estrechamente ligado a él, el movimiento nacionalista e independentista árabe, generado al calor de las luchas anticoloniales. Fueron estos intereses colonialistas fundamentalmente europeos los que, entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial, condicionaron la formación de un sector nacionalista conservador- y oligárquico, regido por grandes y poderosas familias, que se ligaron a Occidente a medida que podían conseguir su propia estabilidad política, Como reacción, se desarrolló otro, más progresista, que fue propagando su influencia en el futuro.

Es esta estructuración contradictoria del nacionalismo árabe, la que arrastrarla, desde el principio, al proceso pan arabista por una senda llena de contradicciones que han llegado hasta hoy en día y que tendrán su plasmación en los enfrentamientos y conflictos de intereses dentro de la Liga Árabe.

Uno de los primeros escollos más importantes fue el surgimiento del estado de Israel y la derrota subsiguiente en la guerra de 1948-1949. Como resultado se desarrolló un amplia hostilidad hacia los países occidentales- aliados de Israel en el conflicto- y hacia las élites dirigentes árabes que aparecen incapaces de hacerles frente.

Esta situación se agudizó cuando en muchos países se produjeron revoluciones y golpes de estado de orientación anticolonial y popular-socialista, cuyo mayor exponente fue el golpe de los Ofiales Libres en el Egipto de 1952. Ello movió a EE.UU. a tina política de pactos militares y alianzas bilaterales en defensa de sus intereses en la zona que llevó a la zona a entrar de lleno en la Guerra Fría.

Respecto a Palestina el material aporta también datos para hacer un repaso histórico sobre el tránsito de los semitas y la conformación de los pueblos en el área. Se trata de combatir un cierto determinismo que intenta hacer creer que la apropiación de un territorio está legitimada por el mero hecho de haber estado ubicado en el lugar. Como consecuencia también se intentaría combatir un reduccionismo del problema a la "posesión" del territorio, cuando en realidad entran en juego factores como su relación como pueblo con los vecinos, los impactos que producen con su presencia y la búsqueda de una armonía basada en el respeto mutuo.

Igualmente se pueden cuestionar los argumentos esencialista; geohistóricos -que son esgrimidos aún hoy en día- sobre la existencia de un pueblo judío desde épocas pretéritas. El trabajo y la reflexión sobre estas cuestiones servirán para que nuestro alumnado entienda que:

En la época contemporánea se trata de explicar algo que ya ha comenzado a tratarse en el Bloque 6, en torno al aumento del movimiento antijudío y al origen histórico contemporáneo de la resistencia palestina. La política de Mandatos y los acuerdos Sykes-Picot, junto a la Declaración Balfour, por los que Gran Bretaña instrumentalizaba a judíos y a árabes durante las guerras mundiales en función de sus intereses, acabó con una actitud de permisividad con la emigración judía y sus organizaciones que poco a poco, fueron asentándose sobre el territorio y radicalizando sus exigencias.


TORNAR


PROPUESTA DE ACTIVIDADES

Proponemos que, igualmente a lo que se ha realizado en el Bloque, 6, y una vez se haya interpretado y clasificado la información, se elabore un Informe que parta de un guión previo que el alumnado debería desarrollar y ampliar.

1º Sobre el Nacionalismo árabe: A partir de la intervención colonialista a principios de siglo, se producen una serie de acontecimientos que pueden ser analizados según de los siguientes apartados:

2º Sobre el período 1928-1945:

3º Sobre Palestina y Jerusalén: se podría hacer una Cronología comentada (en una columna los hebreos y en la otra los cananeos y en medio el eje temporal) que abarcara desde la fundación de Jerusalén hasta 1945. Respecto al primer período algunas ideas que deberían aparecer podrían ser:

VALORES Y ACTITUDES
  • Importancia del mestizaje cultural y la convivencia de colectivos humanos diferentes.
  • Antifundamentalismo religioso-político.
  • Valorar el derecho a la autodeterminación de los pueblos.
  • Desarrollar la capacidad de diálogo entre realidades culturales diferentes.
  • Apoyo a las manifestaciones culturales realizadas desde los movimientos populares.




PROCEDIMIENTOS
  • Elaboración de informes pautados.
  • Utilización de mapas y localización de datos para la elaboración de conclusiones.
  • Elaboración de series cronológicas e inclusión de diferentes hechos.
  • Realización de síntesis de in formaciones diversas.






CONCEPTOS
  • Conformación del Panarabismo y del proceso de Unión Árabe.
  • Conocer las relaciones de las religiones vinculadas a la región como expresión de realidades socioculturales.
  • Fundamentalismos religiosos y políticos.
  • Comprensión de estructuras sociales.
  • El colonialismo en Oriente Próximo: Sistemas de Protectorados y Mandatos.
  • El papel de las élites locales en las estructuras sociales.
  • Tiempo medio y sucesión cronológica.
  • Causalidad múltiple.


TORNAR


El nacionalismo árabe había mantenido a lo largo de estos años una permanente aspiración a la unidad árabe, como resultado del constante ideal de unificación del pueblo árabe, y de la idea de que únicamente la. unión de todos los países árabes ya independientes y de lengua árabe podía hacer posible y efectiva una resistencia real a la injerencia extranjera occidental en la política de los Estádos árabes del Próximo Oriente.

El Mundo Árabe e Israel. MARTiNEZ CARRERAS, J. U. Madrid 1991.

La independencia árabe

A lo largo del período de entreguerras, entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial, se extiende tina nueva fase caracterizada por el resurgimiento y reorganización del pueblo, árabe y la renovación del mundo islámico no árabe; es el inicio del proceso de revolución y descolonización del Islam y su acceso a un estado de soberanía e independencia, pero también de división y conflictos.

Se llega así al establecimiento de los Mandatos orientales, ambos en 1920, bajo la tutela de Gran Bretaña y Francia. La situación, por tanto, queda dominada por la presencia y los intereses del colonialismo europeo, que organiza los Mandatos en su beneficio, y, en cuyo marco queda sometido y dividido el pueblo árabe.

Entre las distintas corrientes del nacionalismo árabe predomina la de carácter conservador y oligárquico, representada por las grandes familias tradicionales y aristocráticas árabes, que cuenta con el apoyo y la ayuda de Occidente y configura así unas nuevas naciones árabes de talante entre conservador -las repúblicas- y feudal -los reinos-, pero siempre prooccidental.

La Independencia árabe. Cuadernos Historia 16, nº 94. MARTINEZ CARRERAS, J. U. Madrid, 1985.

TORNAR



El Panarabismo

El respaldo internacional Y el apoyo al nacionalismo árabe se iba a producir, como en el caso del sionismo, por circunstancias de la coyuntura internacional. Al declararse la Primera Guerra Mundial intervino Turquía -Como ya se ha indicado- como aliada de Alemania, y los países occidentales, principalmente Gran Bretaña y Francia, fomentaron y ayudaron al nacionalismo árabe, así como al sionismo, en su enfrentamiento con el Imperio Turco.

El Panarabismo, o movimiento de unión árabe, se ha manifestado y desarrollado de forma paralela e íntimamente vinculado al nacionalismo árabe: independencia y unidad árabes. El Panarabismo se define corno el movimiento de carácter histórico que tiende a la colaboración y a la unión de todos los países árabes sin exclusión, tanto de Asia como de África, para conseguir la formación de una única nación árabe.

Los orígenes de este movimiento se encuentran en los comienzos de la historia del gran imperio medieval árabe; el Panarabismo moderno resurge durante la primera mitad del siglo XIX a partir de un cierto renacimiento Cultural y político.

El Panarabismo desemboca, al final de la Segunda Guerra Mundial, en la constitución de la Liga de Estados Árabes en 194,5 que, si por un lado, es la expresión de esa vieja inspiración de unidad, por otro está muy lejos de la misma tal como se concebía en sus orígenes ideológicos. y en este sentido decepcionó a amplios sectores del pueblo árabe que, aunque dividio, mantenía vivo el ideal pan arabista.

Así, en los años inmediatos de posguerra, entre 1945 y 1916, todos los países árabes e la región eran ya o son entonces independientes: Arabia Saudita, Yemen, Irak, Transjordania -luego Jordania-, Siria, Líbano y, Egipto, cuya historia se encuentra más estrechamente vinculada a los países árabes de esta región que a los del norte de África.

El Mundo Árabe e Israel. MARTíNEZ CARRERAS, J. U. Madrid 1991.


TORNAR


Liga Árabe y Estado de Israel

En el seno de la Liga se enfrentan corrientes opuestas sobre los problemas más cruciales, llegando hasta la hostilidad declarada.
Pero la Liga Árabe será sometida muy pronto a una dura prueba: el nacimiento del Estado de Israel y la guerra árabe-israelí consiguiente. La derrota en Palestina sacude al mundo árabe hasta sus raíces. Los pueblos árabes se sienten defraudados y humillados, traicionados no sólo por los países occidentales -exigiendo una toma de posición más dura y resuelta hacia Gran Bretaña y Francia, aliados de Israel-, sino también por la oligarquía árabe dirigente, incapaz de enfrentarse a sus enemigos y hasta sospechosa de egoísmo conservador y connivencia con el imperialismo occidental.

La hostilidad hacia los países europeos y hacia las capas superiores de la sociedad que aparecen ligadas a aquellos se acrecienta debido a los esfuerzos de Occidente para involucrar a los países árabes en la dinámica de la guerra fría y crear una cadena de alianzas con pactos militares, bajo la creciente influencia norteamericana, al sur de la URSS.

La Independencia árabe. Cuadernos Historia 16, nº 94. MARTíNEZ CARRERAS, J. U. Madrid, 1985.

Las revoluciones árabes

Desde 1952, y bajo el peso de la influencia de la derrota árabe en la guerra con Israel en 1948-1949, se inicia otra nueva y trascendental fase en la historia del Próximo Oriente, y en especial en los países árabes de la región, en la que, por un lado, se completa el acceso a la independencia de todos los países de la Península Arábiga, y por otro estallan en algunos de los países árabes independientes desde los años anteriores las revoluciones de carácter popular y antioccidental, teñidas de socialismo, y en contra de los regímenes pro-occidentales y oligárquico-conservadores instalados desde las independencias.

Las repercusiones de la derrota militar árabe ante Israel provocaron la revolución egipcia que hizo caer a la monarquía e instauró la República, el asesinato del rey Abdullah de Jordania que fue sucedido por Hussein, los golpes de Estado que convulsionan a Siria, y la revolución en Irak y, en otros países árabes como Túnez con Burguiba. Desde este momento el mundo árabe se vio enfrentado y agitado en su seno por unas tensiones profundas que pusieron en peligro el entramado oligárquico y el orden político levantado por Occidente, y que se polarizan entre unos regímenes pro-occidentales, y tradicionales, que intentan mantenerse a salvo del contagio revolucionario, y unos movimientos revolucionarios de talante popular y socialista, nacionalista y anti-occidental, que buscan conseguir para el mundo árabe su auténtica independencia e identidad histórica, extendiéndose las revoluciones que daban nacimiento a nuevas Repúblicas en los países donde triunfan.

Desde 1949-1954 EE.UU. organiza una política de pactos militares: el de Bagdad en 1955, luego transformado en la C.E.N.T.O., y de alianzas bilaterales con Israel, Arabia Saudita, Turquía e Irán, en defensa de los intereses occidentales, y más en concreto norteamericanos, con lo que la región del Próximo Oriente queda inmersa en la política internacional de la guerra fría.

El Mundo Árabe e Israel. MARTíNEZ CARRERAS, J. U. Madrid 1991.

Repercusiones

En Egipto, provoca las más graves alteraciones al ser el país que, teóricamente más sólido, había sido el principal vencido en la campaña militar. El sentimiento nacionalista de revolución e independencia es asumido por un Comité de oficiales libres, que organiza un golpe de Estado militar el 23 de julio de 1952 y se apodera del Gobierno organizando un Consejo de la Revolución, en el que destacan figuras como el general Naguib y el coronel Nasser. El rey Faruk abdica, un año después es proclamada la república, siendo Naguib su presidente Nasser jefe del Gobierno.

La Independencia árabe. Cuadernos Historia 16, nº 94. MARTINEZ CARRERAS, J. U. Madrid, 1985.

En el orden económico, con implicaciones internacionales en todos los aspectos, el petróleo de la zona se convierte en protagonista mundial al crearse en 1960 la OPEP, y desde 1973 mas acusadamente al desencadenarse la crisis económica de los años má recientes.

El Mundo Árabe e Israel. J, U. Madrid 1991.

TORNAR



Palestina

Cuatro mil años antes de Cristo, los cananeos, un pueblo semita del interior de la Península Árabe, se instalaron en las tierras desde entonces conocidas como Canaan y que más tarde se llamaría Palestina. Los jebuseos, una de las tribus cananeas, levantaron un poblado al que llamaron Urusalim (Jerusalén), o sea "ciudad de paz".

Hacia el año 2000 a C pasa por Palestina, en su ruta al sur, otro pueblo semita nómada, el de los hebreos, conducido por Abraham. Siete siglos más tarde volvieron, procedentes de Egipto, doce tribus hebreas al mando de Moisés. Se trabaron violentos combates por la posesión de la tierra. Sólo cuatro siglos después consiguió David derrotar a los jesubeos y unificar el reino judío. Pero tras la muerte de su hijo, Salomón, los hebreos se dividieron en dos reinos -Israel y Judea- que más tarde cayeron en manos de los asirios (721 a C.) y los caldeos (587 a C) respectivamente. En esta última fecha Nabucodonosor destruyó Jerusalén y llevó a los judíos en cautiverio a Babilonia, de donde algunos regresaron setenta años después por gracia del rey Ciro de Persia.

Palestina fue conquistada por Alejandro Magno en el 332 a C. Luego de la muerte del generalísimo heleno, retornó al imperio egipcio de los Ptolomeos. Más tarde fue dominada por los seléucidas de Siria. Una rebelión encabezada por Judas Macabeo restableció el estado judío en el año 67 a C, pero éste fue pronto sometido a vasallaje por el entonces invencible imperio romano, que tomó Jerusalén a sangre y fuego, en el año 63 a C. Los romanos reprimieron severamente la resistencia de los macabeos, zelotas y otras tribus judías. Como parte de esta represión fueron crucificados miles de rebeldes, entre ellos Jesús de Nazareth, alrededor del año 30 d C; fue demolido el Templo de Salomón en el 70 d C, y los judíos fueron expulsados de Jerusalén, en el año 135 d C.

Los romanos dieron a Palestina su actual denominación. La tomaron del nombre del pueblo filisteo (fenicio) que sin embargo era minoritario en el territorio. Los árabes, un pueblo semita procedente del interior de la península, conquistaron Palestina en el año 634. Según la leyenda, en Jerusalén ascendió al cielo el profeta Mohammed (Mahoma), con lo que la ciudad adquirió carácter sagrado para las tres grandes religiones monoteístas, nacidas de un tronco común. Con breves intervalos de dominación parcial de los cruzados cristianos y los mongoles -en los siglos XI, XII y XIII- Palestina tuvo gobiernos árabes durante casi un milenio e islámicos durante un milenio y medio.

En 1516 el Imperio Otomano conquistó Jerusalén. Mantuvo allí su hegemonía hasta el fin de la Primera Guerra Mundial.

Guía del Tercer Mundo 91/92 IEPALA. Madrid. 1991